Resumen del caso

IV. Operación Fuerza Aliada: ¿Una guerra justa?

A. La zona de combate

Los bombardeos duraron siete semanas, bastante más tiempo de lo que había esperado Clinton, y con bastante más mortandad de la que se anticipaba. "El propio Presidente admitiría más tarde que él había estado ‘50 por ciento’ seguro de que los bombardeos terminarían en una semana".40 Durante el segundo día, el ejército de Yugoslavia inició la Operación Herradura. Policías, militares y unidades paramilitares serbias sistemáticamente quemaron hogares, hicieron redadas de mujeres y de niños para deportarlos y ejecutaron a cientos de hombres.

 

El 31 de marzo, las fuerzas de seguridad expulsaron, según se calcula, a 100.000 personas fuera de Pristina, la capital de la provincia . . . La semana culminó el 1º de abril con una de las imágenes más impresionantes de la guerra: unos 10.000 refugiados obligados a punta de armas de fuego a caminar de dos en dos por millas a lo largo de las rieles de ferrocarril hasta la frontera con Macedonia". Se calcula que en unos ocho días fueron desplazadas 768.000 personas.41

Sin tropas de la OTAN en el terreno, los aliados sólo podían atacar a las unidades serbias desde el aire. Las nubes limitaban frecuentemente la visibilidad. En un trágico ejemplo de la visibilidad inadecuada desde su monitor de 6 pulgadas, el piloto de un F16 de Estados Unidos atacó un convoy y mató a 75 refugiados albaneses en vez de soldados enemigos.

Los ataques aéreos desde 15.000 pies en otros lugares de Serbia alcanzaron a fábricas de municiones, una rejilla de potencia, puentes, refinerías de petróleo, oficinas centrales de partidos, una estación de televisión y centros de comando en Belgrado. Al general Clark le irritaban las restricciones políticas en cuanto a selección de objetivos.

UCayeron bombas en una residencia de Milosevic en la capital. Sólo un avión de Estados Unidos cayó sobre Yugoslavia, y el piloto fue rescatado; un serbio dijo: "No sabíamos que era invisible" (el caza bombardero Stealth F117 Nighthawk de la Fuerza Aérea).42

Al final de cuentas, más chinos que norteamericanos murieron en el guerra. Según Estados Unidos, un mapa anticuado causó el ataque a la embajada de China que mató a tres personas. Varias otras bombas autodirigidas se extraviaron y cayeron en un dispensario médico y en hogares en vez de caer en un cuartel del ejército. Los aliados reconocieron que habían bombardeado por error un tren de pasajeros mientras destruían un puente, y los serbios dijeron que autobuses también había sido bombardeados. Las bombas en racimo no discriminaban entre combatientes y no combatientes. Se calcula que 500 civiles murieron como resultado del daño colateral de los bombardeos de la OTAN.43 Dos oficiales noteamericanos murieron en una misión de entrenamiento con helicópteros Apache; dichos helicópteros nunca se usaron en combate. Las armas de alta tecnología eran caras:

La campaña aérea de 78 días de la OTAN contra Yugoslavia costó hasta 4.000 millones de dólares a Estados Unidos, según cálculos privados y del Congreso . . . Estados Unidos contribuyó con más de 725 aviones, artillería, sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple y tropas de apoyo compuestas por unas 5.500 personas. Clinton llamó a alrededor de 5.000 reservistas. Los aviones de Estados Unidos volaron en 2.300 misiones en las 11 semanas de ataques aéreos. Buques de la marina norteamericana dispararon unos 450 misiles de crucero Tomahawk, a un precio de alrededor de 1 millón de dólares por misil. Bombarderos B-52 de la Fuerza Aérea norteamericana lanzaron 90 misiles de crucero a un costo de uno 2 millones de dólares cada uno".44

Varios cientos de miles de refugiados desestabilizaron los vecinos países de Macedonia y Albania. Funcionarios de Macedonia se resistieron a la llegada de más musulmanes, y trasladaron por la fuerza a algunos de ellos a Albania. Tanto la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para Refugiados como organizaciones no gubernamentales de socorro se esforzaron por aliviar la extraordinaria carga. Estados Unidos aceptó a 10.000 refugiados y la OTAN comenzó a prepararse para hasta 1,5 millones de albaneses desplazados.

Hacia mediados de mayo, Clinton comenzó reconsiderar sus objeciones al empleo de fuerzas terrestres. Era posible que realizar solamente ataques aéreos no sería suficiente para permitir a los refugiados regresar a sus hogares antes del severo invierno de los Balcanes. La intensificación de bombardeos y del embargo petrolero aparentemente no habían debilitado al ejército de Yugoslavia. Blair comenzó a desplegar fuerzas del Reino Unido en Macedonia, en teoría para mantenimiento de la paz después del conflicto, pero posiblemente como fuerza de invasión si hacía falta. Con relación a la solicitud del comandante Clark de la OTAN de 175.000 soldados para una invasión, se le pidió a Clinton que proporcionara 120.000 y Blair preparó llamados a filas para 30.000.45 La CIA calculó que era posible perder entre 10.000 a 15.000 soldados en una guerra terrestre.46 También hubo propuestas de armar al ELK:

B. El campo de batalla interno

Kosovo dividió tanto a partidos políticos como a campos ideológicos. Algunos críticos internos insistieron en que el Presidente desplegara tropas terrestres, mientras que otros exigieron que se pusiera fin a los bombardeos. "Halcones" liberales y humanitarios, principalmente demócratas, se aliaron con internacionalistas conservadores, principalmente republicanos. En su opinión, Estados Unidos era un país excepcional, con responsabilidades únicas de liderazgo internacional: la potencia indispensable. Los liberales que favorecían la guerra aplaudieron el liderazgo del presidente para parar el genocidio. El senador Robert Torricelli de Nueva Jersey, que había defendido ardientemente al Presidente en las audiencias del juicio político, culpó ahora a Clinton por negar la participación de tropas terrestres. Los conservadores que favorecían la guerra consideraban que una derrota pondría en peligro intereses vitales de seguridad en Europa, así como la credibilidad de Estados Unidos/OTAN. "Zbigniew Brzezinski, asesor del seguridad nacional del presidente Carter, acusó a la administración de un nuevo ‘racismo tecnológico’47 basado en la premisa de que ‘no valía la pena arriesgar la vida de un soldado norteamericano para salvar la vida de miles de kosovares’"

En el campo contrario, liberales opuestos a la guerra se aliaron con aislacionistas conservadores: realmente un nuevo orden mundial. Pacifistas religiosos liberales se congregaron para denunciar los bombardeos, y defensores del imperio de la ley protestaron la actitud de Clinton de hacer caso omiso de las normas norteamericanas e internacionales. Insistieron en que fines humanitarios no podían justificar medios violentos y fuera de la ley. Bombas perdidas mataron a mujeres y niños inocentes, lo que hizo que serbios moderados se tornaran contra Estados Unidos.

Aislacionistas conservadores se oponían a gastar más fondos norteamericanos en otro atolladero europeo. Para ellos, someterse a organizaciones internacionales y comprometerse con aliados débiles redundaba en perjuicio de una defensa unilateral eficaz. La mayoría republicana de la Cámara aprobó una resolución que se oponía a la participación de tropas norteamericanas para mantenimiento de la paz; en una votación empatada dicha mayoría derrotó una propuesta democrática de respaldar la Operación Fuerza Aliada. En el Senado, tácticas de procedimiento detuvieron el debate sobre si el Presidente debería o no usar "todos los medios apropiados". Recurriendo a su propia autoridad, el Comandante en Jefe llamó a 5.000 reservistas, y el Congreso asignó todos los fondos que solicitó para operaciones militares y de auxilio humanitario.

Plantado firmemente en el centro, Clinton perdió puntos en las encuestas. Centristas confusos e indecisos se preguntaban si tenía sentido la estrategia del Presidente. Entre los encuestados, 60 por ciento consideraba que era un error anunciar por adelantado que no se usarían tropas terrestres.48 Algunos pragmatistas se quejaron de que los bombardeos habían producido el mismo mal que intentaban prevenir. El 10 de mayo la revista Newsweek informó que menos de 50 por ciento de los encuestados aprobaba la política del Presidente para Kosovo. Jesse Jackson puso al Presidente en una situación incómoda con una misión a Belgrado que resultó en la liberación de tres soldados norteamericanos que habían sido aprisionados por los serbios. Periodistas investigadores concluyeron que Clinton se había metido irreflexivamente en una guerra, distraído por las acusaciones del juicio político y mal asesorado por una Secretaria de Estado testaruda. Páginas editoriales negativas predecían desastre. El Presidente repondió en una columna en el New York Times del 23 de mayo titulada "Una guerra justa y necesaria", en la que indicó: "No excluyo otras opciones militares".

C. La arena internacional

La OTAN. Clinton gozaba de apoyo sin precedentes entre los socialistas alemanes, los ex "peaceniks" y funcionarios franceses que desde tiempo atrás desconfiaban del poder de Estados Unidos en Europa. Observadores que notaron al colaboración entre Clinton y el primer ministro británico Tony Blair dieron al par el apodo de "Franklin y Winston".49 Grecia y los nuevos miembros de Europa Oriental, que estaban más cerca del combate, se oponían a una guerra más amplia. Los generales se quejaron de la interferencia política, pero el consenso se mantuvo. Los Jefes de Estado de la OTAN se reunieron en Washington para la celebración del Cincuentenario y reiteraron que "El presidente Milosevic debía:

1. Garantizar un verdadero alto de todas las acciones militares y poner fin a la violencia y la represión en Kosovo;

2. Retirar de Kosovo sus fuerzas militares, policiales y paramilitares.

3. Aceptar el establecimiento en Kosovo de una presencia militar internacional;

4. Aceptar el regreso incondicional y sin peligro de todos los refugiados y personas desplazadas, y el accesos sin trabas a ellos por parte de las organizaciones de asistencia humanitaria; y

5. Proporcionar garantías dignas de crédito de que está dispuesto a trabajar para poder establecer un marco político basado en los acuerdos de Rambouillet".50

El Presidente visitó la sede de la OTAN en Bruselas a principio de mayo. Para fines de mes, los embajadores de la OTAN habían convenido en una fuerza de 50.000 personas para mantenimiento de la paz después el conflicto. Como preparación, los miembros europeos comenzaron a enviar tropas a Macedonia, y Washington desplegó un contingente de 5.000 personas. Los británicos se pusieron a la cabeza de otros aliados al contribuir más que ellos a una campaña aérea intensificada, que había sido fundamentalmente una operación de Estados Unidos. Blair y los medios de difusión británicos presionaron a Clinton para que aprobara el envío de tropas terrestres para terminar la guerra, pero Estados Unidos no estaba solo en su posición. En el continente europeo, grupos religiosos y activistas opuestos a la guerra comenzaron a tener impacto. En una reunión económica de junio la unidad de la alianza continuaría sometida a prueba durante el verano.

Rusia. Tan pronto Clinton inició el bombardeo, Rusia y China copratrocinaron una resolución del Consejo de Seguridad en que se denunciaba la "flagrante" violación de la Carta y la amenaza a la paz internacional. India no era miembro del Consejo, pero su representante se sumó a China en nombre de la mitad de la población del mundo para oponerse a la operación militar no autorizada. Namibia fue el único otro miembro del Consejo en votar con los dos copatrocinadores, y la resolución perdió por 12 votos contra tres. Los representantes de los países de la OTAN insistieron en que era Yugoslavia quien había violado la Carta. Dos semanas después, Yeltsin profirió: "No nos empujen a una acción militar, porque habrá por lo menos una guerra europea y posiblemente una mundial".51

Sin embargo, el Presidente ruso adoptó poco después una actitud de mayor colaboración por medio del enviado especial Viktor Chernomyrdin. En una reunión con los asesores de Clinton, Chernomyrdin acordó desempeñar un papel de "policía bueno" en las negociaciones en colaboración con el presidente Martti Ahtisaari de Finlandia que haría de "policía malo" para amenazar a Milosevic.52 A principios de mayo, los rusos habían aceptado las condiciones de los aliados en un plan aprobado en una conferencia de ministros de Bonn. Según informaciones, Chernomyrdin indicó a Milosevic que Rusia no podría ayudar si la OTAN invadía.53 Precisamente cuando esfuerzos renovados de diplomacia ofrecían nuevas esperanzas, fue bombardeada la embajada china. No fue sino hasta el 2 de junio que Rusia y Occidente superaron dificultades de último momento para unirse y presentar a Milosevic un plan internacional de paz para Kosovo.

Las Naciones Unidas. En la arena principal , el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó una declaración de preocupación sobre el bombardeo a la embajada, que no satisfizo el pedido de China de una condena explícita. Clinton también ganó una escaramuza en la Corte Internacional de Justicia.

En 1992 Bosnia había acusado a Yugoslavia de genocidio en la corte mundial. Ahora Yugoslavia pidió a la Corte Internacional de Justicia que fallara en contra de 10 aliados de la OTAN como culpables de genocidio, crímenes de guerra y violación de la Carta de las Naciones Unidas. La operación Fuerza Aliada pisoteó los principios de la Carta que ordenaban el arreglo pacífico de controversias y el respeto por la soberanía. La OTAN quebrantó las leyes de la guerra al lanzar bombas que mataron a no combatientes y cayeron en objetivos no militares: la embajada china, un tren de pasajeros y una estación de transmisiones radiales. Estados Unidos evitó la decisión de la Corte Internacional de Justicia sobre el fondo de la cuestión argumentando con éxito que Washington no había aceptado la jurisdicción de la Corte.54

El fiscal principal del Tribunal Penal Internacional para Yugoslavia investigó a Milosevic por crímenes de lesa humanidad en Kosovo: asesinatos en masa, persecución y deportación. La preocupación de los asesores de Clinton era que Milosevic se podría poner aún más recalcitrante si se le amenazaba con un proceso penal. La comunidad internacional nunca antes había acusado a un jefe de estado en funciones de crímenes de guerra. Estados Unidos había evitado amenazar al Emperador del Japón al terminar la Segunda Guerra Mundial. Las fuerzas de la OTAN desplegadas en Bosnia no habían arrestado a comandantes serbios locales acusados formalmente por el Tribunal Penal Internacional para Yugoslavia. El atribuir responsabilidad personal a Milosevic podría prolongar el conflicto de Kosovo. Sin embargo, cuando el fiscal independiente anunció la acusación formal contra Milosevic y cuatro subordinados, Clinton proclamó que apoyaba firmemente esa medida.

Un juez de Grecia solicitó formalmente al fiscal que investigara y procesara a los responsables de bombardeos de la OTAN que mataron a no combatientes y violaron así las Convenciones de Ginebra. Las investigaciones del Tribunal Penal Internacional en Bosnia resultaron en acusaciones formales contra croatas y musulmanes, como también contra los serbios, pero parecía probable que el fiscal decidiría que sólo los serbios serían considerados responsables.

 

 

D. Conclusión

Los bombardeos se intensificaron a principios de junio; los comandantes de la OTAN presionaron a Clinton para que aprobara la invasión, y Chernomyrdin y Ahtisaari emitieron advertencias dignas de crédito. Milosevic cedió. El 9 de junio los generales serbios firmaron formalmente un acuerdo según el cual se retirarían de Kosovo y permitirían a las fuerzas de la OTAN llevar a los refugiados a sus hogares. Un día después, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas apoyó rápidamente las condiciones de arreglo que dictaron los aliados. El representante de Rusia ante el Consejo denunció la guerra aérea de la OTAN antes de votar en favor de una misión de mantenimiento de la paz dirigida por la OTAN y que contaría con la participación de 30 países. A pesar de persistente indignación, China no se opuso con un veto. Por un voto de 14 en favor y una abstención, el Consejo aprobó una administración interina de las Naciones Unidas garantizada por fuerzas de la OTAN con autorización de usar fuerza según el Capítulo VII. Las unidades de la OTAN podían permanecer en Kosovo indefinidamente hasta que el Consejo de Seguridad terminara formalmente su misión. La OTAN consultaría con el Secretario General de las Naciones Unidas Kofi Annan, pero no recibiría órdenes del mismo.

La Operación Fuerza Aliada había terminado. Su sucesor en la OTAN, la Operación Guardián Conjunto (Joint Guardian) contaría con 7.000 norteamericanos para mantenimiento de la paz de un total de 50.000 miembros de KFOR. En una presentación pública de junio 10 a la nación, el presidente Clinton anunció la victoria y la suspensión de los bombardeos. Las fuerzas serbias evacuarían Kosovo y serían reemplazadas por una fuerza internacional de seguridad, preparando el camino para el regreso de refugiados kosovares y para la restauración del gobierno propio. Clinton calificó a Milosevic de criminal de guerra y le acusó de tratar de eliminar a los kosovares mediante una campaña de terror. Clinton reconoció el sufrimiento del pueblo serbio, pero culpó a Milosevic y prometió ayudar a Serbia si este último era depuesto. Pueden examinar el informe completo del Presidente leyendo el texto o escuchando una grabación de su discurso.

Una encuesta de Estados Unidos indicó que 66% de los encuestados adultos apoyaban el despliegue de tropas terrestres de Estados Unidos para mantenimiento de la paz en Kosovo.55 El análisis posterior empezó con las audiencias de los Comités de Servicios Armados y de Relaciones Exteriores del Senado. ¿Serviría la reorientación de la OTAN de precedente a futuras intervenciones humanitarias de Estados Unidos, o sería considerada una excepción? Los críticos internos continuaron el debate sobre si la respuesta de Clinton había logrado demasiado poco al dejar a Milosevic en el poder, o había ido demasiado lejos, tanto en cuanto a daño colateral durante la guerra, como en cuanto al compromiso de postguerra de Estados Unidos de mantener un protectorado en Kosovo durante un futuro indefinido. En junio de 1999, 6.700 de los 20.000 soldados que estuvieron presentes en1996 continuaban en Bosnia, y "ni un solo civil serbio asistió al aniversario de la batalla de Kosovo Polje".56

Preguntas para práctica: Conteste las preguntas para estudio correspondientes a esta sección y lea las respuestas correctas antes de redactar un ensayo escrito.

Epílogo

En febrero del año 2000, seis meses después de la ocupación de Kosovo por la OTAN, la vida estaba lejos de ser ideal. Miembros de minorías serbias, croatas, eslavas musulmanes, montenegrinas y romas se quejaron de hostigamiento y expulsión. La OTAN tenía en mente un Kosovo multi-étnico, pero los no albaneses que vivían allí eran 80.000 personas, número que constituía, según se informó, la tercera parte de la población antes del conflicto. Las comunidades étnicamente divididas padecían de terrorismo y batallas campales. El personal de mantenimiento de la paz de la OTAN luchaba por contener la violencia, entre crecientes quejas sobre su ineficacia. Un soldado de Estados Unidos fue acusado de violación y asesinato. En Serbia, grupos de la oposición exigían que Milosevic dejara el poder, y varios funcionarios prominentes fueron asesinados.

III. La arena internacional

Resumen del caso